La timidez no es limitante para pedir un incremento salarial
En el caso de las personas introvertidas, lo que pueden parecer debilidades, son fortalezas que contribuyen a diseñar una buena estrategia para solicitar un aumento de sueldo.
Solicitar un aumento salarial puede ser una tarea difícil para muchos trabajadores, especialmente para aquellos que son introvertidos o tímidos. El hecho de pensar en cómo lo interpretará un jefe o en la decisión que tomará, puede generar dudas. Sin embargo, la posibilidad de tener ese ajuste puede hacer la diferencia en la productividad, motivación y permanencia de la persona.
Según el psicólogo Carl Jung, las personas introvertidas tienden a centrarse más en sus pensamientos y sentimientos internos que en estímulos externos. Esto significa que sus preferencias de interacción social son diferentes, y al procesar la información de manera más profunda, se vuelven más reflexivos y cuidadosos en sus decisiones.
Es decir, los trabajadores con estas personalidades tienen más dificultad de socializar, y lo hacen de manera diferente, siendo más cautelosos para prevenir posibles malos escenarios que se fabrican en la imaginación. Tener la capacidad de preparación puede ser una de las principales ventajas.
Cómo crear el mejor escenario
Hays indica que la planificación adecuada de estos espacios puede contribuir a fomentar un ambiente más seguro para quien desea pedir un aumento.
La precaución, la cual caracteriza a las personas introvertidas, puede ser una buena herramienta para planear la solicitud de aumento salarial. Lo principal es investigar las remuneraciones promedio del mercado laboral del puesto en el que se desempeña, contemplando los años y nivel de experiencia en la industria en la que se trabaja.
Posteriormente, reunir evidencia del desempeño, como proyectos y avances laborales, puede ayudar a resaltar objetivamente la justificación del incremento salarial que se pedirá.
Susan Cain, autora del libro Silencio: El poder de los introvertidos en un mundo que no puede dejar de hablar, indica que practicar lo que se va a decir puede ayudar a la persona introvertida a sentirse más cómoda y confiada. Esto también se aplica previamente a solicitar una mejora en el sueldo.
Por su parte, Daniel Pink, autor de libros sobre el trabajo y el comportamiento como El poder de arrepentimiento, recomienda ensayar con un amigo o alguien de confianza que finja ser estricto para ayudar a brindar posibles respuestas. Además de ensayar con un amigo, también puede funcionar escribir un guion o puntos claves para abordar la conversación e incluso practicar frente a un espejo, con la finalidad de obtener seguridad cuando se habla con el jefe directo.
Sin embargo, Pink resalta que un problema que tienen las personas ante dicha solicitud es el modo de argumentarla, por lo que explicar claramente el porqué de un ajuste salarial con respeto y directamente, utilizando los logros registrados, puede persuadir al líder.
Hays sugiere que también es fundamental evaluar la situación de la empresa. Cuando se busca un incremento de sueldo en un momento difícil para la empresa, será más complicado obtenerlo.
Momento oportuno
Escoger un momento adecuado para la conversación ayuda a iniciar con una charla más personal sin traspasar los límites de respeto a la jerarquía. Así, se podrá crear una atmósfera de confianza y empatía que permita al superior comprender mejor la situación y las preocupaciones del empleado.
Durante la conversación, es importante enfocarse en los hechos. Los introvertidos, como menciona Susan Cain, suelen ser buenos analizando información y presentando argumentos lógicos.
Cabe resaltar que, según Computrabajo, el aspecto financiero es parte del bienestar integral del talento, y tiene aún más relevancia en contextos de crisis económicas o alzas en la inflación.
Por lo tanto, permanecer muchos años en una sola empresa sin recibir un ajuste salarial puede ser un motivo importante para cambiar de empleo. La remuneración no solo afecta el acceso social sino también la supervivencia, de acuerdo con la plataforma.
Pedir un ajuste o aumento salarial siendo introvertido o tímido puede parecer un desafío, pero con una preparación adecuada y una estrategia clara, es posible enfrentar estas conversaciones con confianza.
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